El padre se molestó ante la falta de compromiso de la empleada, por lo que decidió llevar a cabo una extrema acción. 

Todo ocurrió un día que un padre británico, llamado Christopher, y su esposa se fueron a trabajar temprano en la mañana, pero él se dio cuenta que olvidó algunos documentos importantes, por lo que tuvo que regresar a su domicilio.

En la vivienda, se encontraba la niñera que contrató para cuidar a los hijos del matrimonio, de nombre Sarah, quien estaba durmiendo en lugar de trabajar cuando el hombre volvió a su hogar sin avisar.

Enfurecido ante el hecho, tomando en cuenta que él le pagaba a Sarah para atender a los niños y no se convirtieran en víctimas de una potencial desaparición o secuestro, Christopher decidió darle una inolvidable y extrema lección a la niñera.

Para esto, sacó a sus hijos de la casa por sorpresa y sin avisarle a  su empleada. Esperó a ver cómo reaccionaría ella ante el fingido secuestro, seguro de que aprendería la lección del grave error que cometió al descuidar a los menores.

Tras dos horas de haber llevado a cabo su plan, el padre tuvo noticias de la empleada, quien le escribió diversos mensajes y lo llamó para contarle lo que había sucedido.

Se desconoce si durante ese rato Sarah estuvo dormida o  buscó a los pequeños sin avisar a nadie, pues no contó con tiempo suficiente para aclarar las cosas, ante la insistencia del padre de saber de sus herederos.

De hecho, a la empleada le costó más de un  mensaje admitir que no tenía idea dónde estaban los niños. Posteriormente, reveló que había llamado a la policía, pero que los agentes no quisieron ayudarla –algo bastante sospechoso-.

Eso fue lo que colmó la gota del vaso de Christopher, quien sacó a la luz la verdad y despidió a Sarah, junto con amenazarla de denunciarla por negligencia laboral; consigna Mirror.

Fotos: Reproducción Mirror / Shutterstock