Las recomendaciones tienen como objetivo evitar graves infecciones y enfermedades.

La cama es un espacio en el que se realizan las más variadas actividades, aparte de dormir: puede ser utilizada como “escritorio” para trabajar o estudiar, para comer, tener relaciones sexuales, apoyar la ropa sucia, o incluso como descanso para las mascotas.

La especialista en higiene, Lisa Ackerley, aseguró que si no se lavan las sábanas de manera semanal, quienes duermen allí podrían estar expuestos a serios peligros como virus o infecciones.

En esa línea, precisó que “dependiendo de las actividades para las que se use la cama y también lo limpio que esté uno cuando se acuesta (y del hecho de si se usa ropa de dormir), la cama puede estar bastante más sucia de lo que pensamos, causando un daño en nuestra salud”, según indica el sitio Infobae.

Peligros

El ser humano tiene en su cuerpo distintos tipos de bacterias y hongos que no dañan su salud y que son necesarios. No obstante, la cama funciona como un lugar para que estos se reproduzcan.

Una de las bacterias que se puede extender en las sábanas, si es que no se posee la higiene adecuada, es la Staphylococcus aureus, que está comúnmente en la piel o en la nariz. Esta puede desencadenar en enfermedades de la piel, graves infecciones, heridas o neumonía.

Pie de atleta

Si una de las personas que duerme en la cama tiene pie de atleta, es probable que la otra también se contagie. Esto ocurre incluso si la persona está en tratamiento. En estos casos se recomienda lavar las sábanas a una temperatura alta para acabar con el hongo.

Virus

En el caso de estar sufriendo de un resfrío o gripe, es necesario lavar y cambiar las sábanas con aún más frecuencia para proteger a quienes duermen allí y no perjudicar más su estado de salud. Hay que evitar apoyar pañuelos sucios en la cama.

Ácaros de polvo

Estos organismos microscópicos se alimentan principalmente de la piel muerta, por lo que sus lugares preferidos son los sillones, las alfombras y las camas. Estos no transmiten enfermedades, pero sí pueden provocar problemas de alergia.

En los desechos de estos organismos, se encuentra una enzima que puede generar asma o rinitis.

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